miércoles, 29 de noviembre de 2017

Mejorando nuestro ser interior


La autoestima es la clave para comprendernos
y comprender a los demás.
 Nathaniel Branden


Mejorando nuestro ser interior: LA AUTOESTIMA

   Como docentes o personas de influencia sobre otros, debemos dar lo mejor de nosotros mismos, y esto implica crecer en varias áreas de nuestra vida, nuestro ser interior necesita también de esa “jardinería” diaria que debemos hacer en nosotros mismos.  Uno de los puntos que quisiera hoy tocar es ¿cómo mejorar nuestra autoestima?, y estos consejos que daré a continuación pueden ayudarte también a que puedas ayudar a otros cuando notes que su ánimo decae y que no está valorándose a sí mismo o siendo muy “verdugo” a la hora de autocriticarse.

    Muchas personas no se dan cuenta que afectan su autoestima con sus pensamientos negativos de sí mismas y de la mala forma de pensar que tienen respecto a otros, el mirar siempre la vida con lentes oscuros nos traerá circunstancias muy obscuras por supuesto, así que si quieres sentirte mejor contigo mismo y mejorar tu ser interior aumentando una autoestima saludable sigue los siguientes pasos:

1)    Pon tu mayor atención en tus aciertos, los fracasos son importantes para poder mejorar y buscar soluciones, pero también debes mirar lo que si has logrado, esto mismo debes hacer como docente cuando veas una tarea, muchos docentes tienen la tendencia a ver lo malo y no empiezan resaltando los aspectos positivos del estudiante en el desempeño de la actividad, lo mismo sucede con la vida cotidiana, estamos acostumbrados a recalcarle a los demás sus errores y no vemos las cosas positivas, es como si le diéramos más valor a un error que a 100 aciertos.  Si te ha pasado ¡corrige esa conducta!, necesitamos crecer.

2)    No seas tan verdugo contigo mismo, en ocasiones las personas cuando no nos va tan bien como quisiéramos tendemos a reprocharnos a nosotros mismos y a sumergirnos en la autocrítica destructiva, criticarte a ti mismo está bien siempre y cuando no lo estés haciendo CULPÁNDOTE de todo, recuerda que la culpa no te ayudará en nada, si has cometido un error puedes rectificarlo, recuerda que retroceder es avanzar si el retroceso implica una rectificación.  Así que en vez de flagelarte en tu mente, pregúntate qué cosas puedes hacer para mejorar lo que has hecho.

3)    Mira el fracaso como una oportunidad de crecimiento, por lo general nuestra autoestima se lanza por el piso cuando cometemos al error que nos lleva al fracaso, pero la verdad es que los fracasos son oportunidades de mucho aprendizaje, un pensamiento de Henry Ford que me gusta mucho dice: “El fracaso es la oportunidad de empezar de nuevo, con más inteligencia”.  Y también me gusta un proverbio chino que dice así:  “La gloria no estriba en no fracasar nunca sino en levantarse cada vez que caiga”.

4)    Reconoce aquellas cosas que puedes cambiar y las que no puedes, por ejemplo si tú amas cantar pero desafinas continuamente, y pretendes de la noche a la mañana ser un gran cantante, deberías pensar en tomar más clases de canto para mejorar, o tal vez lo haces bien pero deberías mejorar tocando un instrumento musical para que seas un cantante más integral, pero si tú te das cuenta que no sirves para la música sino que te va mejor siendo fotógrafo, dibujante, actor, comediante, locutor, etc, entonces deberías intentar otro camino que te de mejores resultados, la cuestión es no estancarse en una sola cosa.  Si tú quieres perder peso es algo que puedes cambiar haciendo dieta, pero si quieres cambiar de estatura es algo que no podrás hacer, a menos que te pongas provisionalmente unos tacos, entonces hay cosas que podemos cambiar y otras que no.

5)    Enumera las cosas en las que eres bueno y proponte metas, has una lista de todas aquellas cosas en las que eres bueno, tanto talentos como cualidades con valores humanos que te caracterizan, has otra lista en aquellas cosas que te gustaría desarrollar en ti mismo y pasos o estrategias que vas a hacer para conseguir esos objetivos. 

   Finalmente recuerda que debemos agotar todos nuestros esfuerzos antes de quejarnos o culparnos o andar con reproches contra nosotros mismos, la cuestión está ¿Qué voy a hacer respecto a esto? ¿Cómo puedo mejorar? ¿en qué aspectos he avanzado como persona?, debemos autoevaluarnos a nosotros mismos cada día, todos los seres humanos somos maestros en algún área, y debemos aprender a evaluarnos a nosotros mismos para no ser tan radical con los demás que están pasando por las mismas luchas (inclusive hasta peores) que nosotros pasamos. 

   Bueno mi gente linda debo despedirme por hoy, gracias por leerme, no se olviden de dejarme su comentario si les gustó esta entrada, si les fue de bendición, si se sintieron identificados de alguna manera y gracias por el feedback.  Un abrazo al alma.  Con cariño y respeto, Liliana.

“La victoria es del más perseverante”. 

Napoleón Bonaparte.

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